
Últimamente he estado pensando mucho en lo que necesita nuestra ciudad para que todos vivamos felices en ella. Ya ha habido algunos pasos para lograr un cambio positivo, como los muros de la Comuna 13, donde viven muchos de mis estudiantes, que se han llenado de colores y formas que cuentan su historia y están llenos de esperanza por un futuro mejor. Aunque en otras épocas se podría ver este lugar como un sitio gris, peligroso y sin vida, ahora es completamente diferente, lleno de turistas, arte, música, baile y mucho optimismo. Les dejo por aquí este audio que grabé para una de mis clases con un poco más de historia de la Comuna 13.